Los mejores trucos para un eyeliner de sueño
Al limpiar con el hisopo, quitas un poco de la base que ya te aplicaste y no queda el delineado por el que tanto hemos luchado.
Para ello, con una brocha pequeña y un poco de corrector, define debajo del delineado para que se vea limpio y perfecto.​
En el Makeup hack del día, hablaremos del eyeliner. Esa colita de gato que nos vuelve loca a todas para hacerlas de acuerdo a nuestros ojos y que se vean parejos. Aquí te dejo algunos truquitos de cómo lograr un eyeliner perfecto. Aunque lo principal que debes tener ante todo es paciencia y rezarles a tus dioses para que el delineado no ocupe todo tu ojo como mapache.
CINTA ADHESIVA
​Coloca una cinta adhesiva justo debajo de donde quieres empezar el eyeliner, en dirección un poco debajo del final de tus cejas. Esto te ayudará a ubicar el delineado en la mejor posición, además, puedes dibujar la línea sin miedo, pues la cinta no dejará que embarres el asunto. Recuerda poner la cinta siempre mirando de frente al espejo, debido a que, si miras abajo, cierras los ojos o estires tus párpados, cuando termines tendrán una forma distinta a lo que creías en un momento. Mirada al frente.
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HILO
Si la cinta adhesiva no te funcionó o se te hace complicada, o no tienes cinta adhesiva, quizá un hilo cualquier te saque del apuro. Coge un hilo de un tamaño aproximado de 7 cm. Aplica tu eyeliner favorito en la parte del medio del hilo. Presiona el hilo en la parte donde deseas la colita de gato, esto ayudará a que sea una línea más recta y precisa. Finalmente, termina de dibujar la línea por el párpado y rellénala. Y recuerda, siempre con la mirada al frente.​
HISOPO
CORRECTOR
Si a pesar de que luchaste con todos los trucos habidos y por haber, pero siempre te terminas pasando de la línea, un hisopo será tu mejor amigo.
Aplica agua micelar (si tu eyeliner no es aprueba de agua) o desmaquillante bifásico (si es aprueba de agua) en poca cantidad en el hisopo. Limpia el exceso de forma cuidadosa. Su forma pequeña te dará precisión y firmeza para pulir y tener un delineado perfecto.​
​Muchos conocen la Ley de Murphy, “Si algo malo puede pasar, pasará”. Por eso es mejor prevenir, y antes de todo, un gran consejo es siempre apoyar el brazo en alguna superficie firme al hacer el delineado, así como también posar la mano en tu cara para que no te tiemble la mano. Gracias, Murphy.